Localizada a 178 km de Rio de Janeiro, tiene una configuración geográfica muy particular, con innumerables atracciones naturales. En sus playas, mas de dos mil, es posible quedarse al abrigo de un almendro centenario, encontrar conchillas y piedras con hermosos formatos esculpidos por el tiempo y contemplar las olas golpeando en las rocas majestuosas. En el mar, salpicado por barcos, yates, lanchas, goletas y veleros, hay gente practicando todo tipo de deportes. De la época en que era un importante puerto exportador de café, mantiene todavía un convento y algunas iglesias, que merecen ser visitadas. Entre sus playas mas conocidas se encuentra: Anil, ubicada en el centro de la ciudad, entre el puerto y el yacht club, es muy disputada por mucha gente por su localizacion. Do Frade, al sur, a 7 km. Con su orilla llena de piedras, con muchos eucaliptos y cocoteros y una banda de arena amarilla y mar transparente, es muy recomendada buena para bañarse y mangaratiba, a 53 km, con grandes hoteles y condominios lujosos que ocupan la orla marítima, es recortada por penínsulas de aguas calmas.